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En este apartado, encontrará trabajos para los que algunos clientes de la empresa han autorizado la publicación. Evidentemente, Ester Habas Traduction se compromete sistemáticamente, salvo petición expresa por su parte, a una total confidencialidad de cara a sus documentos.

TRADUCCIÓN

A continuación podrá leer un extracto de un libro sobre Saint-Quentin que Ester Habas tradujo del francés hacia el español para las Éditions du Huitième Jour. El documento estaba cargado de informaciones históricas y de juegos de palabras, lo que hizo que el trabajo de traducción fuese a la vez apasionante y difícil.

Francés
3-1-1 / Glorieux aînés

« Les musiciens font ce qu’ils peuvent des notes, Josquin en fait ce qu’il veut ». C’est bel et bien à un Saint-Quentinois, le chanteur et compositeur Josquin Des Prés, que Martin Luther adressa cet hommage enflammé. Au milieu du XVème siècle, alors qu’il est enfant de chœur à la collégiale de Saint-Quentin, Josquin Des Prés montre d’extraordinaires dispositions vocales. Son talent lui vaut d’intégrer en 1459 la chorale de la cathédrale de Milan, puis la cour de Laurent le Magnifique, à Florence. A partir de 1486, sous le pontificat d’Innocent VIII et d’Alexandre VI, il devient l’un des chanteurs attitrés de la chapelle papale, avant de se mettre au service de Louis XII. Tout en enchantant ses contemporains de sa voix, Josquin Des Prés compose. Ses messes, ses motets polyphoniques et ses chansons profanes font de lui l’un des musiciens les plus remarquables de la Renaissance. Trois siècles plus tard, un autre compositeur acquiert lui aussi une certaine renommée : maître de musique à la collégiale de Saint-Quentin – une fonction qu’il occupera pendant plus d’un demi-siècle – Bernard Jumentier est l’auteur d’une centaine de pièces de musique sacrée.

Mais le plus illustre des Saint-Quentinois reste Maurice-Quentin de La Tour. Né à Saint-Quentin en 1704, il manifeste très tôt un goût prononcé pour la peinture. Adolescent, il quitte sa ville natale pour parfaire son apprentissage à Paris. Il révèle alors un talent indéniable dans l’art du portrait, pour lequel il utilise de façon systématique la technique du pastel, qu’il maîtrise parfaitement. En 1736, son portrait de Voltaire lui vaut d’élogieux commentaires. Agréé par l’Académie royale de peinture en 1737, il y est officiellement reçu comme « peintre de portraits au pastel » en 1746. Dès lors, Maurice-Quentin de La Tour s’impose comme un artiste incontournable. Devant son chevalet, se précipite tout ce que le royaume compte de courtisans, de généraux, de philosophes, d’hommes d’église et de grands bourgeois. La famille royale elle-même s’attache ses services : son portrait de Louis XV, réalisé en 1748, immortalise la majesté bienveillante du roi.

Español
3-1-1 / Gloriosos mayores

«Los músicos hacen lo que pueden de las notas, Josquin hace lo que quiere». Fue efectivamente a un cantante y compositor de Saint-Quentin, Josquin Des Prés, que Martin Luther dirigió este homenaje apasionado. A mediados del siglo XV, mientras que es monaguillo en la colegiata de Saint-Quentin, Josquin Des Prés muestra extraordinarias disposiciones vocales. Su talento le vale ingresar, en 1459, en la coral de la catedral de Milán y, a continuación, en la corte de Lorenzo el Magnífico, en Florencia. A partir de 1486, bajo el pontificado de Inocente VIII y de Alejandro VI, se convierte en uno de los cantantes titulares de la capilla papal, antes de ponerse al servicio de Luis XII. Encantando a sus contemporáneos con su voz, Josquin Des Prés también compone. Sus misas, sus motetes polifónicos y sus canciones profanas hacen de él uno de los músicos más distinguidos del Renacimiento. Tres siglos más tarde, otro compositor adquiere también un cierto renombre: maestro de música en la colegiata de Saint-Quentin – una función que ocupará durante más de medio siglo – Bernard Jumentier es el autor de un centenar de obras de música sagrada.

Pero el más ilustre de los habitantes de Saint-Quentin sigue siendo Maurice-Quentin de La Tour. Nacido en Saint-Quentin en 1704, manifiesta muy pronto un gusto pronunciado por la pintura. Adolescente, deja su ciudad natal para perfeccionar su aprendizaje en París. Revela entonces un talento innegable en el arte del retrato, para el que utiliza de forma sistemática la técnica del pastel, que controla a la perfección. En 1736, su retrato de Voltaire le vale elogiosos comentarios. Habilitado por la Academia real de pintura en 1737, es oficialmente recibido como «pintor de retratos al pastel» en 1746. Desde entonces, Maurice-Quentin de La Tour se impone como un artista ineludible. Delante de su caballete, se precipita todo lo que el reino cuenta de cortesanos, generales, filósofos, hombres de iglesia y grandes burgueses. La familia real misma se aficiona a sus servicios: su retrato de Luis XV, realizado en 1748, inmortaliza la majestuosidad condescendiente del rey.

INTERPRETACIÓN

Podrá escuchar y visualizar un video realizado en el marco del proyecto Qantara, llevado a cabo, entre otras instituciones, por el Institut du Monde Arabe de París. La voz en off que puede escuchar en español es la voz de Ester Habas, que hace una interpretación simultánea del discurso de la interventora.

VOZ EN OFF

Podrá escuchar y visualizar igualmente otro video realizado en el marco del proyecto Qantara, llevado a cabo, entre otras instituciones, por el Institut du Monde Arabe de París. La voz en off que puede escuchar en español es la voz de Ester Habas, grabada en un estudio mediante una lectura de un texto que había traducido ella misma del francés al español.

Pinche aquí para escuchar la grabación y ver el video.